La noche del cazador

29 agosto 2011


La noche del cazador
Autor: Nalini Singh
Título original: Slave to Sensation
Editorial: Plaza&Janés / Enero 2011
ISBN: 9788401339356
Género: Paranormal  / Futurista
Serie: 1º- Psi/Cambiantes
En una sociedad donde el poder está en manos de quienes niegan las emociones, aceptar el afecto, los sentimientos y el amor puede ser devastador...

Año 2079. Los psi son la raza de humanos con poderes psíquicos que, en los últimos cien años, se han adueñado del gobierno y las finanzas mundiales. Tuvieron que pagar un alto precio a cambio: ser condicionados desde el nacimiento, a no tener emociones.

Se consideran un peldaño arriba en la escala evolutiva, por encima de las razas "inferiores" como los humanos y los cambiantes, dominados por sus instintos animales y con quienes mantienen una paz cargada de tensión.

Los psi son... perfectos. Pero Sascha Duncan teme que ella no o sea. Desde siempre ha percibido emociones que no logra controlar. Si la descubren, la "rehabilitarán". Para ganar tiempo, accede a ser el enlace en un proyecto propuesto por uno de los clanes cambiantes. Parte humano y parte animal, Lucas Hunter pertenece al clan de los DarkRiver, humanos-leopardo, y es un cambiante ávido de todas esas emociones que los psi desprecian. La intención de Lucas es introducirse en la cerrada y elitista sociedad de los psi y la joven, fría como un témpano de hielo, será su llave de entrada: a través de ella espera descubrir al asesino que está diezmando a los suyos.

Aunque una parte de Lucas empieza a sentirse atraído cada vez más por Sascha...

Es difícil encontrar una nueva autora de este género que suene, simplemente distinta de todo lo que se está publicando. Desde que descubrimos a los Cazadores Oscuros de Sherrilyn Kenyon, nadie nos había atrapado con sus historias, sus protagonistas y el mundo que imagina como Nalini Singh, que rompe esquemas y brilla con luz propia.
Después de una falta de interés absoluto por el género paranormal, no encontraba ninguna autora que me llamara la atención, incluso llegué a cansarme de autoras tan consagradas como Sherrilyn Kenyon o JR Ward. Por eso mismo, cuando Nalini Singh llegó a España pisando tan fuerte, no presté atención ni me preocupé por averiguar nada de lo que ofrecía. Pero hace poco leí El ángel caído. No sé muy bien por qué, tal vez porque era una edición de bolsillo y era cortita. El caso es que me lancé y me llevé una sorpresa, aunque por desgracia volvía a encontrarme con vampiros (ufff… estaba saturada de tanto colmillos), me sorprendió el estilo de la autora. No sé todavía si leeré la segunda parte pero la curiosidad me llevó a echar un vistazo a la otra saga y lo que leí en el resumen me sorprendió por ser diferente a todo lo que había leído en paranormal.

De modo que compré La noche del cazador y empecé a leer con más curiosidad que expectaciones. Y me metí de lleno en la historia.

Primero: Nalini Sing ha sabido crear un mundo peculiar; viajamos al futuro, en un mundo muy diferente al que conocemos por sus habitantes. Los humanos conviven con otras dos razas: los cambiantes, que como su nombre indica cambian su forma y viven bajo las normas de los animales que llevan dentro aun así perfectamente integrados; y los spi, personas con poderes síquicos muy desarrollados y aparentemente en la cumbre del poder. Pese a ser una novela futurista, la sociedad que la autora crea es cercana, no tan diferente a nivel físico de la que nos rodea, me refiero a que no nos metemos en un entorno que nos desconcierte. Las relaciones entre razas son el eje central de la historia. Ahí radica el estilo personal de la novela.

Las diferentes razas cohabitan pero no se mezclan unos con otros, los prejuicios y la desconfianza los separan irremediablemente. Los spi son muy cerebrales y fríos, carentes de emociones, las relaciones personales y familiares son casi inexistentes. La única lealtad que sienten es la de la competitividad en su profesión. Consideran a los cambiantes seres salvajes y primitivos. Estos viven en clanes cuya jerarquía requiere una lealtad incuestionable al alfa. El contacto físico es primordial, se nutren de ello y los lazos familiares son básicos en la comunidad. Se protegen unos a otros y la camaradería premia esa cercanía. Los humanos apenas aparecen, lo que los deja en el eslabón más bajo de esa sociedad.

En La noche del cazador, los spi encargan a Sasha Duncan supervisar un negocio inmobiliario con Lucas Hunter, un cambiante del clan Darkriver. Es una relación comercial inaudita pero ambas razas tienen sus motivos escondidos para convertirse en socios. Cada raza necesita saber más de la otra, descubrir sus puntos débiles. De modo que una mujer aparentemente fría e inalterable se verá las caras con un hombre altamente dominante por su posición de alfa en su clan y muy sensual por su condición de cambiante.

Pero Sasha es una spi diferente, siente emociones ajenas a su raza y vive con el constante miedo de ser descubierta por los suyos porque no dudarían en sacrificarla. La perfección para los spi es la falta de humanidad porque funcionan casi como máquinas, las emociones son una debilidad peligrosa. De modo que Sasha se escuda tras las barreras síquicas que aprendió a erigir a su alrededor desde muy joven. Cuando conoce a Lucas, enseguida siente el magnetismo que el cambiante emite y conocer a su clan despierta su curiosidad por saber más de unos seres que no dudan en mostrar sus emociones o en prodigar muestras de afecto, lo que la lleva a añorar esa cercanía.

Sasha es un personaje complejo, siempre luchando por su propia supervivencia, ya sea con los suyos porque los conoce (sabe cómo funcionan sus mentes racionales) o con los cambiantes porque son el enemigo. Es vulnerable, poco a poco vamos descubriendo sus temores, el pánico que siente al pensar que su mente fraccionada está derivando hacia la locura porque desde muy pequeña su madre le ha dejado claro que la perfección de su raza es estar por encima de cualquier emoción. Lo contrario es el fracaso y la muerte.

Por su parte, Lucas es muy sensual, no duda en tocar, acariciar, oler. Está en su naturaleza y su condición de alfa de su manada le lleva a tomar siempre la delantera, mandar, controlar y por encima de todo proteger. De modo que Sasha se convierte en un reto, no sólo para conseguir información sobre la cerrada sociedad spi, necesita averiguar lo que esconden los ojos estrellados de la spi que parece mucho más sensible a todo lo que la rodea de lo que debería percibir un ser de su raza. La verdad pensaba, al conocerle al principio de la novela que iba a ser mucho más dominante, mucho más autoritario pero reconozco que me ha gustado que no lo fuera, me ha gustado que fuera tan cercano, tan atento con los suyos. Y sobre todo, su faceta de cambiante no está muy presente, me refiero a su capacidad de cambiar de forma. Eso también lo he agradecido porque no es realmente el fondo de la historia, lo primordial en la pareja es la lucha entre sus dos mentes.

En esta novela vemos los prejuicios que provoca la poca comunicación que mantienen las dos razas, la desconfianza hace que vean lo peor del otro. Me ha gustado mucho como la autora ha llevado este tema tan básico en la historia, como Sasha descubre que existe otra forma de vivir y los sentimientos que ve en los cambiantes la llevan a anhelar el cariño que nunca recibió de su madre. También aprende a discernir las mentiras de su propia raza, provocando una profunda conmoción en ella. Tal vez Sasha pueda parecer muy hermética al lector, pero está en su subconsciente, se ha criado reprimiendo sus emociones, lo que hace lógico su comportamiento.

Tanto la pareja como los personajes segundarios me han gustado mucho, la relación de Lucas con su clan y con el clan de los lobos y su alfa: Hawke. La intriga no tiene mucho peso aunque está bien llevada aportando su punto de curiosidad. Pero es la relación entre Lucas y Sasha lo que atrapa, ya sea por la justa medida de debilidad y fuerza de ella o la picardía y sensualidad de él que no se priva de provocarla. Es una pareja bien equilibrada, que no se hace sombra porque están a la altura del otro.

Me he llevado una agradable sorpresa, por el estilo sencillo y a la vez pulcro de la autora, que nos transmite con soltura los sentimientos de ambos protagonistas, cada uno con mentalidades tan opuestas. Aunque no todo me ha parecido coherente, por ejemplo la compleja red a la que los spi se conectan. En el caso de Sasha, en gran parte su mundo se centra en sus poderes síquicos, lo que hace que sea algo abstracto y muy ambiguo. Y tantas explicaciones pueden cansar un poco. Otro punto es el desenlace, me ha parecido muy precipitado para después sufrir un parón hasta el final. Entiendo que la autora necesitaba atar un último cabo, como su problema por no poder permanecer en la spi-net, la red donde las mentes spi se regeneran/alimentan o como se llame. Algunos detalles me parecieron salidos de una chistera.

En resumen, La noche del cazador me ha gustado, he disfrutado pese a haber encontrado algunos puntos que no me han convencido del todo, pero si algo me ha gustado es la pareja. He disfrutado con la evolución de los dos, sobre todo ella. No hay mucho sexo y eso también lo he agradecido, porque también estoy un poco cansada de encontrarme con escenas gratuitas que no aportan gran cosa a la trama, lo que importa aquí son los sentimientos y las emociones. Con respecto a la trama, con el género paranormal es cuestión de aceptar el mundo que nos describen como es, sin profundizar mucho y creo que aquí al autora ha sabido mostrarnos muy bien las diferencias entre cambiantes y spi. He echado en falta algo de interacción con los humanos para averiguar qué relación tendrían ya que ni poseen las habilidades síquicas de los spi ni la fuerza de los cambiantes. La novedad de la novela es la sociedad spi, que puede resultar confusa porque se basa en pensamientos, con todo me ha parecido creíble, sin indagar mucho porque en ese caso cualquier novela paranormal podría diseccionarse y parecer ridícula o imposible. ¿Alguien se la cuestionado la lógica de los vampiros relacionados con dioses griegos y atlantes de Sherrilyn Kenyon? No, no he leído nada de eso y son excelentes novelas paranormales, de modo que la sociedad spi me ha parecido tan coherente como cualquier otra trama paranormal.

Conclusión: me ha gustado y estoy dispuesta a leer la segunda parte. Lo que me frena es que son unas cuantas novelas y reconozco que cuando llego a la cuarta suelo perder interés.