Las abejas reina de Gill Hornby

25 octubre 2013

Las abejas reina
Gill Hornby
Título original: The hive
ISBN: 9788408119623
Editorial: Planeta / 10 septiembre 2013
Género: Narrativa
Ha empezado un nuevo curso en la pequeña localidad de St. Ambrose. Mientras los pequeños están en clase, las madres, como cada año, se reúnen a la entrada y la salida del colegio. Hay que decidir cómo o, mejor dicho, quién organizará el mercadillo de este año.
En esta comunidad todas las relaciones cuentan, y ninguna cara nueva pasa desapercibida. Bea y su pequeño corrillo de desesperadas seguidoras no están dispuestas a que ninguna recién llegada consiga el protagonismo. Aquí sólo hay sitio para una reina de la recaudación de fondos anual, y este curso hay demasiadas candidatas.

En Saint Ambrose, una pequeña localidad en la campiña inglesa, se inicia un nuevo curso escolar; en realidad se inician dos: el de los niños y el de las madres. Cuando los pequeños entran en las aulas, fuera, bajo el haya centenaria, un pequeño grupo de mamás se reúne en torno a Bea, la mujer perfecta, la amiga que todos quieren tener, la madre emprendedora, en resumen la abeja reina de la colmena que representan las madres de los alumnos del colegio de St Ambrose. Pero también están las mamás que van como satélites, sin saber si pertenecen al grupo de la elite de Bea: están las rebeldes, las solitarias, las cabreadas, las que huyen de todo aquella estructura tan jerarquizada, y están las nuevas madres que quieren colaborar…

Las abejas reina es ante todo una comedia, el retrato irónico de una pequeña comunidad esencialmente femenina, porque los padres apenas existen en esta novela. El único hombre que tiene que hacerse en hueco en el comité de St Ambrose, que parece controlar todos los aspectos financieros del colegio, es el nuevo director y no siempre lo consigue, porque a base de sonrisas, siempre se ve relegado a ser un simple espectador cuando hay que tomar decisiones.

Como el título indica va de abejas reina, de jerarquía, de estructura social muy definida; de manera sutil Gill Hornby compara la organización del grupo de mujeres que componen el comité con una colmena, con una reina y sus obreras y desde luego cualquier amenaza debe ser eliminada. La autora retrata la naturaleza humana a través del comportamiento sus personajes, con su generosidad o su egoísmo, su ternura o indiferencia. Y lo que prevalece es el fuerte sentimiento de unión, para bien o para mal, la amistad, la necesidad de pertenecer a un grupo, integrarse aunque una parezca no querer.

Sin embargo, con tantos personajes, algunos parecen perder fuerza, otros quedan en la superficie y están los que apenas llegamos a conocer. En su conjunto, la novela revela con maestría la complejidad de una comunidad, pero si nos ceñimos a los personajes de manera individual, todo queda en la superficie. Muchas de estas mujeres empiezan y acaban la novela de la misma manera, sin apenas evolución en su personaje, lo que te hace preguntarte en qué le ha afectado todos los acontecimientos a lo largo de todo un curso.

Tal vez porque al principio tuve que ubicarme entre todos esos personajes, pero se me hizo lento y poco apetecible y según avanzaba en la novela eché en falta más presencia de los niños, los maridos, más vida familiar.

En su conjunto, Las abejas reina es una comedia de enredo entre mujeres que nada tienen en común excepto mejorar las instalaciones del colegio de sus hijos. Tiene escenas divertidas, y sin dudas el personaje que más me ha gustado es Georgia: acida como un limón y a la vez tan tierna que una sola mirada a su pequeño Amish es suficiente para derretirla. El personajes más desaprovechado es Bubba, dejaba entender que aportaría mucho más a la comunidad de St Ambrose, pero enseguida se pierde en la telaraña de Bea, que por cierto me habría gustado conocer un poco mejor, aunque sea para entender su afán de protagonismo. Heather y Rachel puede que sean las que mayor evolución sufren y ambas me han gustado mucho, cada una a su manera.

Las abejas reina: una historia divertida de amistad entre mujeres. A pesar de las carencias que he percibido, me he divertido con la ironía y el fino humor inglés que despliega la autora.