Los jueves en el parque de Hilary Boyd

21 junio 2013


Los jueves en el parque
Hilary Boyd
Título original: Thursdays in the Park
ISBN: 9788401354830
Editorial: Plaza & Janés / 13 Junio 2013
Género: Sentimental

Jeanie tiene 60 años, una casa bonita, su propio negocio, una hija casada y una encantadora nieta de dos años. Aunque en apariencia lleva una vida cómoda y tranquila, la verdad es que su matrimonio con George es aburrido y totalmente predecible. Hasta que un día conoce a Ray. Cada jueves, cuando acompaña a su nieta al parque, se encuentra con este atractivo abuelo que juega con su nieto. Empiezan hablando de los niños y acaban explicándose la vida.

Las conversaciones de los jueves en el parque son cada vez más importantes para ambos y, poco a poco, Ray y Jeanie se dan cuenta de que se han enamorado. Pero ¿tiene derecho a abandonar lo que ha sido su vida durante 30 años y destrozar a su marido? ¿Sería una locura arriesgarlo todo para perseguir un nuevo amor?

Lo primero que me llamó la atención, cuando leí el argumento de esta novela de Hilary Boyd, fue la edad de los protagonistas porque en la novela romántica o sentimental los protagonistas suelen ser jóvenes, incluso un pelín maduros pero aun jóvenes. Sin embargo la autora nos plantea una pregunta que no está exenta de lógica y acierto: ¿Se puede empezar de nuevo a los 60? Todos diríamos que sí al unísono, pero si alguien de nuestra familia pusiera fin a un matrimonio de más de treinta años, rompiera todas las normas de su vida y de su matrimonio para vivir una historia de amor tardía, ¿cómo reaccionaríamos? Creo que pondríamos en duda el buen juicio de ese familiar porque no es lo mismo arriesgarlo todo a los 30 que a los 60. Y es que la esa edad arrastramos un enorme bagaje emocional fruto de muchos años en común con una misma persona y la decisión afecta a muchas personas, como hijos y nietos…

Los jueves en el parque es una historia dulce que se lee rápido con agrado y sin embargo profundiza en las relaciones de pareja, en la compleja relación entre un hombre y una mujer después de tres décadas de matrimonio. Jeanie tiene aparentemente todo cuanto se puede desear, pero la fachada tranquila y ordenada de su vida esconde una profunda frustración. Su marido es una buena persona, tal vez un poco dominante y controladora, pero no es un monstruo. Al contrario, puede llegar a ser atento, generoso… pero oculta algo a su mujer, algo que durante diez años ha estado minando su matrimonio sin que él se dé cuenta. Porque George es de los que piensan que su matrimonio puede aguantar todo: sus silencios, sus secretos, su egoísmo. Y Jeanie le ha consentido hasta cierto punto que se saliera siempre con la suya, porque ella no suele discutir. No es que sea cobarde, pero prefiere vivir en paz y si eso significa ceder, pues cede.

Hasta que cumple los 60, todos parecen recordarle que es una vieja. Su marido decide por los dos un cambio radical en sus vidas, su hija le apoya al cien por cien, pero nadie escucha a Jeanie excepto Ray, un hombre que conoce en el parque donde lleva a su nieta. Junto a ese desconocido descubrirá que es agradable que te miren, te escuchen, se rían contigo hasta que entre ellos nace un sentimiento que los pilla desprevenidos. Entonces empiezan los tira y afloja, primero de la propia Jeanie, después de los demás, los amigos que la apoyan, los familiares que la condenan.

He disfrutado de principio a fin, me ha gustado conocer a sus personajes; eso sí, esperaba que Ray tuviese algo más de protagonismo porque la novela nos relata una historia de amor, pero ante todo es el viaje interior de una mujer madura que aprende a anteponer sus deseos a los de su familia. Es la historia de Jeanie. El punto a favor de la novela es que no hay ni buenísimos ni malísimos, sino gente normal y corriente que hace lo posible por mantener las cosas como más le conviene: comenten errores y pagan las consecuencias. El punto negativo es Ray: tal vez porque el asunto más espinoso de la historia es la relación de Jeanie con su familia, pero Ray apenas se da a conocer y lo eché de menos.


En conclusión, Los jueves en el parque ha sido una agradable sorpresa. Cuando la recibí en casa me puse a buscar información y leí algo que me pareció bastante desafortunado, como: “Del porno para madres al sexo para abuelas” haciendo referencia a las famosísimas cincuentas sombras de Grey. No tiene absolutamente nada que ver porque si bien el sexo tiene que ver en la relación entre Ray y Jeanie, la autora pasa por encima con mucha elegancia y ternura. Esa frase, aunque muy comercial, puede inducir a error al lector porque si bien Jeanie redescubre el deseo, Hilary Boyd hace sobre todo hincapié en las emociones como las dudas, la indecisión, el miedo a la soledad, el renacer de la ilusión… es mucho más complejo que un revolcón sesentañero.


*Gracias a Plaza & Janés por el ejemplar*