Encuéntrame en el Cupcake Café de Jenny Colgan

19 diciembre 2012


Título original: Meet Me at the Cupcake Cafe
Editorial: Vergara / 14 Noviembre 2012
ISBN: 978-84-15420-20-0
Género: Chick-lit

Isabel Issy Randall tiene un novio guapo pero poco cariñoso; un cuerpo con muchas más curvas de lo que manda la moda; un empleo bien pagado pero aburrido; una pasión desenfrenada por la repostería, y una notable habilidad para preparar las recetas de su querido abuelo Joe.
De repente se queda sin novio, sin empleo, con todos sus kilos de más y sus treinta y un años bien cumplido. Pero Issy no es de las que se dejan vencer fácilmente, y decide que ha llegado la hora de intentar hacer realidad su sueño: montar un café especializado en cupcakes, esos irresistibles pasteles en miniatura que saben de maravilla y se derriten en la boca…
Pero las cosas no serán tan sencillas, ni en el plano empresarial ni en el de sus sentimientos.
Si te encantan los pasteles y no usas la talla cuarenta desde hace tiempo, entra en esta novela y disfruta de la amistad entre mujeres, y de una historia que demuestra que sí eres valiente puedes hacer lo que te propongas.

Parece que los cupcakes andan por todas partes, en las pastelerías y en los libros. Encuéntrame en el Cupcake Café cuenta una deliciosa historia con recetas incluidas de las muchas que Issy realiza en su café. Se ambienta en un barrio de Londres, en concreto en Pear Tree Court, un callejón sin salida con una pequeña plaza y un peral junto a una tienda cerrada que ha visto pasar muchos negocios y parece condenada a ver como fracasan todos, hasta que llega Issy y lucha por sacar adelante su sueño y su pasión.

No se puede negar que la repostería tiene un gran papel en la novela, primero con las recetas; todos los capítulos empiezan con una, a cual más apetitosas, con los ingredientes, las manera de hacerlo, incluso con algún que otro comentario personal. La autora hace muchas alusiones a los aromas, texturas, aspecto. Las papilas gustativas se ponen en alerta con solo leer el libro. Segundo porque Jenny Colgan sabe transmitir la pasión de Issy por lo que hace. 

Los personajes son muchos y muy variados. Primero está Issy, cae bien desde el principio aunque peque de cándida, porque sueña con una familia tradicional ya que en su caso solo tuvo a su abuelo Joe, un hombre muy trabajador que se pasó media vida amasando, horneando e inculcó la pasión por la repostería a su nieta. Fantasea con un marido, hijos, una casa… con todo el paquete. Tal vez por eso no se permite abrir los ojos en todo lo referente a su novio, un ejecutivo agresivo que la obliga a mantener su relación en secreto porque ambos trabajan en la misma empresa. 

Y llega el desastre, pierde su trabajo, de paso a su novio, que no hace nada por ayudarla. Issy se ve obligada a decidir qué hará el resto de su vida y emprende una aventura que la aterra tanto como la atrae. Tiene las recetas de su abuelo Joe, aunque la salud de éste es más que preocupante, y a su amiga Helena que le infunde valor y optimismo. Entonces aparecen nuevos personajes en su vida, como Austin, el director del banco que concederá el crédito a Issy y abnegado hermano mayor que tuvo que hacerse cargo de su hermano pequeño de diez años a la muerte de sus padres; Pearl, su camarera, una madre soltera, una luchadora que hace lo imposible por sacar adelante a su hijo Louis de apenas tres años, para mi gusto uno de los personajes más entrañable de la novela; Caroline, una mamá pija que ve como su vida se viene abajo cuando su marido la abandona con los dos pequeños y sin un penique, lo que la obliga a buscar trabajo; y un sinfín de personajes del barrio bastante variopintos todos ellos.

Encuéntrame en el Cupcake Café es una historia amena con una protagonista que despierta simpatía en el lector, incluso cuando recae en el mismo error una y otra vez. Jenny Colgan ha escrito una novela chick lit entrañable, con una protagonista real, convincente, que comete errores, aprende, supera los obstaculos y lucha por su sueño. Es una historia amena, muy bien ambientada, se lee rápido por el ritmo ágil y enamora por la ternura que despierta en el lector, porque lo que prevalece en la novela, además de la repostería, son las relaciones entre los personajes, cada uno con sus problemas. 

Si bien la trama puede resultar previsible, he disfrutado de principio a fin, por el calor humano que desprende el libro en su conjunto. Muy recomendable para amantes del género, incluso para las que sienten reticencia por el chick lit.