Una canción casi olvidada de Katherine Webb

03 noviembre 2012



Título original: A Half-Forgotten Song
Editorial: Lumen / 18 Octubre 2012
ISBN: 9788426421159
Género: Narrativa
Zash Gilchrist es un cuarentón que ha tocado fondo. Al borde de la ruina económica y emocional, lo único que le queda es su pasión por el arte de Charles Aubrey, un famoso pintor al que su abuela presumía de haber conocido en los años treinta durante unas vacaciones en Dorset.
Dispuesto a contar la verdadera historia de Aubrey, Zach viaja hacia las costas escarpadas de la región para seguir la pista del artista. Es ahí, entre brumas y acantilados, donde Zach conoce a Dimity, una mujer mayor y algo extravagante, que tiene mucho que contar.
Sentado en la cocina de Dimity, Zach escucha y vuelve atrás en el tiempo, a cuando la anciana era aún una chiquilla y vivía en una chabola con su madre, conocida por ser la bruja del pueblo, mientras Aubrey y su familia descansaban en una mansión cercana. Así, poco a poco, el hombre llega a descubrir un hecho oculto durante años, un secreto y una obsesión que han marcado para siempre la vida de Dimity y la de quienes rodearon a Aubrey.

Zach, solo después de su divorcio y lejos de su hija, necesita aferrarse a algo porque incluso su negocio, una galería de arte, está a punto de venirse abajo. De modo que recurre a un proyecto inacabado, un libro sobre Charles Aubrey y su obra. Para ello, decide viajar hasta Dorset, donde el pintor pasó tres veranos con su familia. Allí entre la campiña y los acantilados de una región aislada, Charles encontró una musa inesperada, una joven de belleza salvaje, Mitsy. Setenta años después Zach da casualmente con ella, una anciana de aspecto frágil y deseosa de hablar del que fue el gran amor de su vida. Lentamente Zach descubrirá la verdad sobre los misteriosos hechos que acontecieron a finales de la década de los treinta.

Katherine Webb
La novela oscila entre el presente y el pasado, justo antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial, y se situa en su mayor parte en la costa de Dorset, en un pequeño pueblo llamado Blacknowle. Alli llega Zach con la intención de averiguar algo más de Charles Aubrey y a partir de ahí el lector se sumerge en una desgarradora historia de amor que se inició años atrás, intensa y emotiva. Desde ya voy a decir que la novela me ha cautivado, de principio a fin, en sus formas y su contenido.

Para empezar diré que la narrativa de Katherine Webb es magnífica, pulcra, detallista, y muy rica. El conjunto es un estilo pausado y a la vez fluido que se lee con avidez sin altibajos. Sus descripciones de los paisajes son el marco sombrío perfecto para ambientar la historia, la soledad, una naturaleza casi salvaje, como la propia Mitsy.

Pero si algo destaca en la novela son sus personajes, todos están muy bien perfilados, muy complejos, ambiguos, inocentes, suspicaces o crueles. Esgriman el mismo carisma con sombras y luces, personas que a pesar de los acontecimientos que les toca vivir resultan convincentes. Katherine Webb nos lleva de la mano adentrándonos en lo más profundo de sus mentes, de su sufrimiento, sobre todo en Mitsy, el eje central de la novela porque tanto el pasado como el presente giran en torno suyo. Primero entramos en contacto con la anciana, quebradiza, al final de una larga vida en un paraje aislado, después con la adolescente rechazada por toda la comunidad, humillada por los niños, maltratada por su propia madre. Es una joven solitaria, sedienta de afecto que no deja indiferente. Es un personaje rico en matices que puede conmover tanto como horrorizar, en la misma medida, de los que dejan su huella en el lector incluso después de haber acabado la novela.

Otras portadas
Y finalmente está el conjunto, la novela en si, de las mejores que he leído este año. Desde el principio se intuye que nada es realmente lo que parece, algo no encaja y lentamente pero sin que el interés del lector decaiga, la autora ahonda en la naturaleza humana de sus personajes hasta un desenlace sorprendente. Con una memoria muy selectiva que contradice su aparente senilidad, Mitsy desvela a través de sus recuerdos lo que ocurrió contando a su oyente lo que necesita que se sepa a la vez que sigue ocultando los hechos más devastadores. Resulta conmovedor el anhelo de la joven por ser aceptada por los Aubrey, por hacerse amiga de Delphine y Élodie, conseguir el afecto de Celeste y de captar la atención del pintor. Zach es el que indaga con el afán de conocer un poco mejor a Charles Aubrey para su libro pero también por motivos personales e hilvana los retales de información que Mitsy le relata hasta llegar a la verdad. Las últimas cien páginas son fascinantes, me resultaba imposible dejar de leer.

Una canción casi olvidada es una historia de amor obsesivo, trágico, conmovedor que lleva a una persona infeliz a cometer errores irreversibles en circunstancias extremas y vivir con sus consecuencias. Es el pasado que nunca queda atrás y resurge de manera imprevisible, nos habla de la capacidad de amar hasta límites insospechables, de los sueños que nunca se realizan como se espera, de las mentiras adornadas de anhelos que se convierten en una verdad engañosa, de los remordimientos que ahogan la etérea y frágil felicidad y del precio a pagar por esos escasos momentos de dicha.

Si El legado me sorprendió gratamente, Una canción casi olvidada me ha dejado asombrada. No cambiaría ni un punto, ni una coma. Katherine Webb se pone a la altura de autoras de la talla de Kate Morton y le deseo el mismo éxito y reconocimiento. 


*Gracias a Lumen por el libro*