Especial Tour: El jinete de Bronce (parte I)

07 agosto 2012



¡Nuevo Tour! Como sabéis, uno de nuestros desafíos para este 2012 consistía en leer la trilogía de Paullina Simons. Si hace unos meses publicamos la reseña de El jinete de Bronce, hoy, no hemos podido resistir la tentación de investigar un poco y regalaros este magnífico recorrido por los escenarios que recogen la historia de amor de Alexander y Tatiana. En este viaje virtual nos trasladamos hasta Leningrado, el actual San Petersburgo. ¡Esperamos que os guste!

- Posibles SPOILERS en los fragmentos citados -
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Ataque alemán a Kiev
Hombres y mujeres, ciudadanos de la Unión Soviética, el gobierno soviético y su dirigente, el camarada Stalin, me han encomendado la lectura del siguiente comunicado. A las cuatro de la mañana, sin una declaración de guerra y sin que se planteara ninguna reclamación a la Unión Soviética, las tropas alemanas han atacado nuestro país, han atacado sobre Zitomir, Kiev, Sebastopol, Kaunas y otras ciudades. [...]
Fue el 22 de junio de 1941 cuando el destino de miles de vidas cambiaron para siempre. Apodado como la operación Barbarroja, las tropas alemanas iniciaron la invasión de la Unión Soviética, si bien hasta el momento existía un pacto de paz entre ambos territorios. Siendo un día tan señalado, pues supone el primer atisbo de una larga y cruda guerra, no es de extrañar que también sea el día en el que comienza la novela El jinete de Bronce. Y en ese incipiente caos y temor, conocemos a la familia Metanova, en especial, a la joven Tatiana que, inocente, desconoce el verdadero significado de una guerra.

Nevski Prospekt
Con lo que sí disfrutaba era con el recuerdo de cuando, con catorce años y el cuerpo delgaducho de la adolescencia, se había puesto el vestido por primera vez y había salido a pasear por Nevski, una mañana de domingo. Para recordar aquella sensación se había puesto el vestido precisamente en este domingo, el día que Alemania acababa de invadir la Unión Soviética.

Nevski Prospekt es la avenida principal de San Petersburgo. Con más de cuatro kilómetros de largo, recoge comercios y monumentos como la Catedral de Kazan, el Palacio Stroganov o la Librería Nacional. Un retrato de la opulencia y la pobreza, puesto que allí convivían distintas clases sociales. Pero aquel día Tatiana, con su vestido favorito, blanco bordado con rosas rojas, acabó sentada en una parada de autobús en Ulitsa Saltikov-Schedrin, cerca de su casa. Allí, comiendo un helado, ajena a lo que se avecinaba, la encontró Alexander.

Ulitsa Saltikov-Schedrin (actualmente, Kirochnaya). Junto al parque Táuride.
 Encontré a mi verdadero amor en las orillas del Kama- dijo Alexandr, sin dejar de mirarla.
-Yo encontré a mi verdadero amor en Ulitsa Saltikov-Schedrin, mientras estaba sentada en un banco y comía un helado.
-Tú no me encontraste. Ni si quiera me buscabas. Yo te encontré.
-Alexandr, ¿me buscabas?-preguntó Tatiana después de una pausa muy larga.
-Toda mi vida.
Un soldado y una civil, dicho de otra forma, un hombre y una niña. Hasta ese día Tatiana, casi a sus dieciséis años, no había sentido curiosidad ni interés en el sexo opuesto. No obstante, aquella tarde fue eclipsada por su presencia, no podía apartar la vista de él. Ni él de ella. Así surgió, un primer intercambio de palabras, una presentación más formal y... una tarde en compañía mutua recorriendo diferentes lugares de Leningrado.

Campo de Marte

Entre otras calles, cruzaron el Campo de Marte. En honor al dios de la guerra, Marte según la mitología Romana, éste campo fue construido en la primera mitad del siglo XVIII aprovechando las tierras de un pantano desecado. Era un lugar donde se celebraban desfiles militares, pero también donde se sepultaron soldados y obreros caídos en la revolución de febrero y se añadió un monumento en su memoria. En 1957, se encendió la primera Llama Eterna del país.

Cuartel Pavlov
Sin prisas cruzaron el Campo de Marte, Tatiana descalza y balanceando los zapatos en la mano. Se calzó de nuevo en cuanto llegaron a la acera, y cruzaron la calle. Se detuvieron delante de un edificio de cuatro plantas que sólo se distinguía por no tener puerta. Un pasadizo oscuro era la vía de entrada.
- Éste es el cuartel Pavlov - le informó Alexander -. Aquí está mi regimiento.
-¿Éste es el famoso cuartel Pavlov? - Tatiana contempló la sucia fachada -. No puede ser.
- ¿Qué esperabas? ¿Un palacio con las torres nevadas?
Al día siguiente, Alexander la estaba esperando a la salida del trabajo en la fábrica Kirov, una de las más importantes de Leningrado y donde se construyeron tanques para la guerra.

Ejemplo fábrica Kirov

- ¿Cómo sabías que me encontrarías aquí?
- Tu padre me dijo ayer que trabajabas en la Kirov. Pensé que ésta sería la parada donde esperarías el autobús.
- ¿Por qué? - preguntó ella, risueña -. ¿Es que tenemos tanta suerte con el transporte público?


Uno de los lugares más especiales donde Alexander y Tatiana pasaban horas sentados charlando, compartiendo cenas, confesiones y sentimientos reprimidos, era el jardín de Verano. El parque más antiguo de San Petersburgo trazado por órdenes de Pedro el Grande en el siglo XVIII, rodeado de más de un centenar de estátuas de dioses y héroes.
Jardín de Verano (A la izquierda, estátua de Saturno)

- Shura - dijo Tatiana con voz trémula -, ¿te acuerdas del día en que me diste tu libro de Pushkin? ¿Cuando me diste del comer en el jardín de Verano?- Como si fuera ayer - Alexander sonrió --. Fue la noche que te enamoraste de mí. - Tatiana se sonrojó y se aclaró la garganta.
- ¿Hubieras... si yo no fuera tan recatada... me hubieras...? - Se interrumpió y por un momento apartó la mirada.
- ¿Qué? ¿Qué? - Él le oprimió la mano -. ¿Si te hubiera besado?
- Mmm...
 - Tania, me tenías tanto miedo... - Alexander meneó la cabeza al recordarlo, con el cuerpo dolorido -. Estaba loco por ti. ¿Besarte? Me habría tirado encima de ti en aquel mismo banco junto a Saturno si me hubieras dado alguna señal.
Saturno, dios de la agricultura y la cosecha, pactó con su hermano Titán reinar en su lugar, pero para ello debía acabar con toda su descendencia. Motivo por el cual se representa devorando a su hijo.
De las fuentes del jardín de Verano, donde está instalada la estátua de Saturno, surgió el nombre del río Fontanka, antes llamado riachuelo anónimo. Son quince los puentes que cruzan dicho río, entre los cuales destacan el puente Lomonósov, Anichkov y Pantaleón.

Río Fontanka
Tatiana se detuvo cerca del canal Fontanka, se cruzó de brazos y esperó. 
Alexander también se detuvo, pero no replicó.
- ¿Te lo estás pensando?- Le tiró del brazo, al tiempo que intentaba ocultar su sufrimiento. Después lo soltó, y le dijo con una voz que reflejaba claramente su angustia -: Sé, Alexander, que cuando llevas esas prendas, tu uniforme de soldado, la llevas como una armadura contra mí, para no tener que decirme nada. [...]
Por otra parte, el palacio de Táuride conectaba a través de una galería de columnas con el jardín de Verano. Ordenado por el propio Príncipe de Táuride y diseñado por Starov, éste último acondicionó un gran parque y un puerto en la parte frontal del palacio.

Palacio y parque Táuride
No había paz en su interior. Mientras estaba en la azotea, cerraba los ojos y se imaginaba que caminaba, sin yeso, sin cojear, con Alexander. Caminaban por Nevski hasta la plaza del Palacio, seguían por la orilla del río, alrededor del Campo de Marte. Cruzaban el puente Fontanka, atravesaban el jardín de Verano para salir otra vez a la orilla del río y, luego por Smolni, el parque de Táuride, hasta Ulitsa Saltikov-Sheldrin, pasaban frente a su banco, y de allí a Suvorovski, para regresar a casa. Y mientras caminaba con él, era como si estuviera caminando durante el resto de su vida.
Plaza del Palacio

La Plaza del Palacio, denominada así por la presencia del edificio más antiguo y célebre, el Palacio de Invierno, es la plaza central de San Petersburgo. En medio de ésta se encuentra la Columna de Alejandro, diseñada por Auguste de Montferrand.

En realidad, la que fue la residencia de los Zares de Rusia, es uno de los principales edificios que conforman el museo Hermitatge. Gran parte de la colección fue adquirida por los zares y se caracteriza por abarcar todo tipo de antiguedades, romanas y griegas, arte oriental, ruso además de cuadros y esculturas procedentes de Europa Occidental. Constituye una de las mayores pinacotecas del mundo.
De izquierda a derecha: el teatro Hermitage, el arco sobre el canal de Invierno, el Gran Hermitage, el Pequeño Hermitage y el Palacio de Invierno. Río Neva.







Después de comprar los helados, Alexandr y Tatiana continuaron caminando a lo largo del Neva, en dirección al oeste, hacia el ocaso y por delante del esplendor verde y blanco del Palacio de Invierno.
En aquel momento, Tatiana vio a un hombre al otro lado de la calle, y se detuvo bruscamente. [...]
Palacio de Invierno
- ¿Quién es aquel hombre? - preguntó, tremendamente conmovida por su expresión.
- Es el conservador del Hermitatge.
- ¿Por qué mira los cajones de esa manera?
- Son la única pasión de su vida. No sabe si volverá a verlos de nuevo alguna vez.

Con la invasión de los alemanes, las obras de arte del Hermitatge fueron evacuadas. Miles de voluntarios se dispusieron a embalar más de un millón de obras, no obstante, tan solo dos trenes llegaron a su destino, Sverdlovsk. Los conservadores se dedicaron a proteger las obras que se quedaron allí y en otros palacios. Al finalizar la guerra, tras ser restaurado de algunos daños que sufrió, el museo reabrió sus puertas, recuperadas las obras trasladadas.


Canal Obvodnoi
Las calles de Leningrado son también protagonistas y partícipes de la historia de amor de Alexander y Tatiana. Canales, monumentos, edificios históricos...cada uno de los lugares mencionados evoca algún recuerdo especial de esta maravillosa trilogía. Con éste último fragmento, el cual hace referencia al canal más largo de San Petersburgo, nos despedimos de ésta primera parte del tour de la novela El Jinete de Bronce.

Un puñado de veces, Alexander dejó que Tatiana utilizara su fusil como el contrapeso de un equilibrista mientras caminaba por la barandilla del canal Obvodnoi.
- No se te ocurra caerte al agua, Tania - le dijo una vez -, porque no sé nadar.
- ¿Lo dices en serio? - le preguntó ella, incrédula. Trastabilló.

Esperamos que hayáis disfrutado del tour, ¿quién se apunta a un viajecito real a Rusia? ;)

Si tenéis alguna sugerencia, podéis contactar con nosotras.

Información extraída de Wikipedia. Fuente imágenes: Google y página de la trilogía en Facebook.