El impostor

Título: El impostor

Autor: Anne Stuart

Título original: Shadow Lover

Editorial: Titania / 2002

ISBN: 978-84-95752-13-0

Género: Contemporánea

Serie: sin serie

En la mansión de los MacDowell todos aguardan la muerte inminente de Sally, matriarca de la familia. Sólo su hija adoptiva, la joven Carolyn Smith, parece sufrir ante la evidencia del fatal desenlace y procura hacer todo lo posible para ayudarla en esos difíciles momentos. Carolyn sabe que la única persona capaz de devolver a su madre la paz necesaria para enfrentarse a la muerte es Alex MacDowell, su verdadero hijo. Pero Alex desapareció hace ya dieciocho años y nadie ha vuelto a saber nada de él... hasta esta noche. SU IDENTIDAD ES UN MISTERIO. Conoce muy bien la fama de rebelde y consentido que tenía Alex MacDowell cuando huyó hace casi veinte años y no espera un gran recibimiento. Pero ahora que ha vuelto, no piensa renunciar a nada: ni al amor de Sally ni, por supuesto, a la cuantiosa herencia que percibirá cuando ella muera. Sin embargo, alguien va a entrometerse en sus planes: Carolyn. Alex casi había olvidado sus ojos, inteligentes, curiosos y demasiado atractivos como para resistirse a mirarlos, aunque sabe que al hacerlo corre el riesgo de poner al descubierto su verdadera identidad.Y ELLA CREE CONOCERLA. Carolyn observa aterrorizada al extraño que dice ser Alex MacDowell. Es verdad que tiene su mismo rostro y su misma figura, que sus gestos son idénticos a los de Alex y que sus maneras no han cambiado. Pero Carolyn sabe que se trata de un impostor. Porque ella es la única testigo de la desaparición de Alex MacDowell aquella lejana noche, la única que vio cómo caía en una playa solitaria, asesinado. Sin embargo, si es cierto que Alex murió, ¿quién es entonces este extraño que parece conocer todos sus secretos? ¿Y por qué ha logrado que renazca en ella esa mezcla de atracción y odio que Alex siempre le provocaba?

La familia MacDowell parece un nido de serpientes, personas que lo tienen todo, posición social, dinero, belleza, pero carecen de moral, sentido de la lealtad y sobre todo amor al prójimo. Es la única “familia” que Carolyn ha conocido en toda su vida, aun así, y a pesar de la soledad y de no pertenecer realmente a los MacDowell, siente una profunda devoción por Sally MacDowell, una mujer caprichosa que la recogió en su hogar cuando no era más que una niña. El resto de la familia no la aceptó nunca como un miembro más, aunque a ella poco le importa porque Sally es todo lo que necesita… y Alex, el hijo de Sally, desaparecido dieciocho años antes.

Una mañana Carolyn se encuentra con un hombre que dice ser Alex MacDowell, el hijo tarambana que no hacía más que meterse en líos y que todos daban por muerto. La aparición del desconocido es de lo más oportuna ya que Sally tiene un cáncer terminal y la fortuna se dividirá entre los hermanos de la moribunda y el hijo de esta. Esa coincidencia y un recuerdo borroso de Carolyn la convencen de que ese Alex es un impostor que sólo busca el dinero.

Un tira y afloja empieza entre los dos en un ambiente sofocante, un caserón en Vermont rodeado de un paisaje invernal. La aparición de los hermanos de Sally y sus sobrinos podría entorpecer los planes del impostor pero todos parecen aceptarle sin hacer demasiadas preguntas lo que confunde a Carolyn (y a lector) dada la codicia de la familia y la negativa de Sally a pedir una prueba de ADN (Difícil de entender ya que es la respuestas a todas las dudas que produce la llegada del susodicho Alec MacDowell). Pero lo peor es que ese hombre despierta en ella emociones que creía muertas desde la desaparición de Alex y luchar contra esa atracción se convertirá en la principal meta de la joven, mas resulta difícil convencerse de que el desconocido es un impostor cuando sabe detalles del pasado que sólo el hijo de Sally y ella conocían. Eso y el recuerdo de lo que sucedió dieciocho antes siguen despertando desconfianza y confusión.

El ambiente de recelo es constante a lo largo de toda la novela. ¿Alex es realmente el heredero de Sally o un hombre guiado por el dinero? ¿Y si es Alex, por qué no dice lo que pasó dieciocho años antes? La verdad, la historia suscita muchas preguntas y las incoherencias en las actitudes de los demás miembros de esa encantadora familia y dada su avaricia resultan desconcertantes. El carácter reservado del desconocido revela un hombre endurecido por la vida que ha llevado y observa a su supuesta familia con un deje de desprecio. La única que le inspira curiosidad y algo más íntimo es Carolyn y su desconfianza le resulta divertida. Pero por encima de todo ve en ella a una mujer solitaria que no podrá llevar una vida completa hasta que se aleje de esa familia que no la quiere, incluso el cariño de Sally no parece sincero.

Es una buena novela de amor con telón de fondo cargado de una intriga que no es otra que averiguar la verdad, sobre todo indagar el secreto de la desaparición de Alex. Los personajes son ambiguos y Carolyn parece nadar entre dos aguas sin saber qué creerse o en quién confiar. La narrativa es fluida, los diálogos coherentes y la trama bien montada. Anne Stuart sabe dar a sus personajes carisma y carácter y los personajes segundarios interactúan entre ellos y los protagonistas aportando más intriga, despertando más desconfianza. Según avanza la historia, los secretos se van revelando, desvelando la sordidez de la familia MacDowell.

Se puede recomendar y pasar una tarde agradable.