Las amigas de los ojos oscuros de Judith Lennox

14 marzo 2014

Las amigas de los ojos oscuros
Judith Lennox
Editorial: Maeva / 14 febrero 2014
ISBN: 978-84-15532-71-2
Género: Narrativa
A Liv se le cae el mundo encima cuando su padre las abandona a ella y a su madre, y tienen que empezar una nueva vida en el pueblo de una amiga de juventud de su madre. Muy pronto, la tímida Liv conoce a las que serán sus mejores amigas: la bella Rachel y la rebelde Katherine. Al crecer, las tres chicas evolucionan de manera muy diferente —Katherine persigue sus sueños profesionales en Londres, Rachel se casa muy joven con el amor de su vida, y Liv se va a estudiar a la universidad—, aunque seguirán siendo las mejores amigas. El día antes de dar a luz, Rachel llama a sus amigas para decirles que quiere revelarles un secreto, pero nunca llega a contárselo. Descubrir el secreto de Rachel se convertirá en una prioridad para Liv y Katherine a lol argo de sus vidas.


Tres amigas de la infancia y toda una vida por delante. Eso podríamos pensar cuando empieza Las amigas de ojos oscuros de Judith Lennox. Para ubicarnos, la historia se ambienta en Inglaterra entre los 60 y los 70, décadas muy convulsas con un cambio cultural que alejó más que nunca a los padres de los hijos, cuando las mujeres por fin encontraron el inicio del camino de una libertad plena, ya sea en sus profesiones o sus vidas amorosas. Al menos esos deseaban…

Liv ve como a los diez años su padre desaparece de su vida y se traslada con su madre, Thea, a una pequeña comunidad del interior de Inglaterra. En Fernhill Diana Wyborne las espera, amiga de su madre y compañera durante la Segunda Guerra Mundial en el cuerpo de enfermeras. Liv conoce entonces a la hija de esta, Rachel y poco después a Katherine, la íntima amiga de Rachel. Las tres se convertirán en uña y carne, hermanas de sangre, de sueños y aventuras, hasta que cumplen los dieciocho. Entonces las tres toman caminos diferentes:

Katherine se marcha a Londres donde inicia su carrera profesional en una revista independiente y muy reivindicativa. Ante todo, Katherine huye del ambiente de clase media de su familia, del anonimato que representa ser la hermana mediana —nunca se ha sentido ni la han tratado de manera especial— y sobre todo del ejemplo de su madre que vive únicamente para su familia sin ninguna meta personal. La joven es ambiciosa, anhela una vida ajetreada, una profesión y libertad.

Liv emprende sus estudios universitarios pero sin una meta concreta. Se siente perdida, y su temperamento enamoradizo la lleva a una sucesión de decepciones amorosas en una década en la que el amor libre estalla entre una juventud que quiere romper todos los moldes establecidos por las anteriores generaciones. Hasta que conoce a Stefan Galenski, un joven profesor universitario con mucho carisma. Liv se enamora pero su carácter tímido le impide acercarse, de modo que cuando Stefan muestra sentir los mismos sentimientos que ella, no duda en seguirle hasta donde él diga sin importarle los sacrificios que eso supone.

Rachel, la más tranquila, conoce a Hector Seton, ocho años mayor que ella. Por primera vez descubre que lo único que ambiciona es casarse con él y vivir a su lado en la enorme y destartalada propiedad de la familia Seton en el campo. Pese a la oposición de sus padres, en concreto de su padre, diputado en el Parlamento, consigue hacer realidad su sueño junto a Hector… pero en el último mes de su embarazo ocurre algo y llama a sus amigas para que vayan a verla. Por desgracia, Rachel no tendrá la oportunidad de contar su secreto a sus amigas y Liv y Katherine vivirán con la tristeza de no haber acudido a la llamada de auxilio de su amiga.

Quien lea Las amigas de ojos oscuros no debe esperar que ese misterio sea el punto central de la trama. Ante todo es una historia de amistad pero también de maduración por parte de unas jóvenes que ven como sus sueños no siempre son lo más adecuados para ellas. Viven, aman y aprenden de sus errores. Cada decisión afectará sus vidas y su relación de amistad. Cada una se encamina hacia experiencias muy opuestas y refleja tanto la vida tradicional en el campo como la libertad y el ajetreo de la ciudad, la maternidad, el matrimonio, la soltería autoimpuesta, la infidelidad, las aspiraciones profesional y las metas no cumplidas.

Las amigas reflejan diferentes tipos de mujeres en el corazón de la liberación de la mujer; una etapa muy concreta donde afloraban las comunas, las casas ocupadas, las drogas y por encima de todo una generación que quería ser diferente.

A lo largo de todos esos años aparecen más personajes que formaran partes de las experiencias de todas ellas de manera puntual o permanente y si bien al principio puede parecer que los padres tendrán más relevancia, por lo contrario enseguida queda claro que las protagonistas son las tres amigas, de manera directa o indirecta.

Al principio la empecé con muchas ganas y enseguida me metí de lleno, pero como me esperaba otra historia, los diferentes giros me desconcertaron. De ahí mi aviso al principio. Sin embargo, insistí a pesar de mis dudas y acabé disfrutando de una historia de amistad que va de la niñez a la madurez que proporciona la experiencia, las alegrías y las decepciones. Judith Lennox nos ofrece un retrato de toda una generación que hizo lo posible por ser diferente a sus padres y con los años aprendieron que los ideales no siempre eran factibles ni coherentes.

En resumen, me ha gustado, por la historia en sí pero también por los personajes muy bien perfilados. La novela es un tanto introspectiva pero no se me hizo pesada. Al contrario disfruté conociendo mejor a Las amigas de ojos oscuros. ¿La recomiendo? Sí, pero no esperéis una historia de secretos y misterios. Sí es cierto que una se pregunta cuál es ese secreto que Rachel quiere contar a Liv y Katherine, no es lo más importante de la novela.