La esposa perfecta para el duque de Jennifer Ashley

11 mayo 2013


La esposa perfecta para el duque
Jennifer Ashley
Título original: The Duke's Perfect Wife
Editorial: Ediciones Pàmies, Phoebe / 8 Abril 2013
ISBN: 978-84-15433-20-0
Género: Histórico
Serie: 4º- Highland Pleasures

Lady Eleanor Ramsay es la única que sabe la verdad sobre Hart Mackenzie. La que en otro tiempo fuera su prometida es la única mujer con quien él ha podido desahogarse.
Hart lo tiene todo, un ducado, riqueza, poder, influencia, todo cuanto desee. Todas las mujeres le desean, pues sus dotes para la seducción son legendarias. Pero Hart ha sacrificado mucho para mantener a salvo a sus hermanos, primero de su brutal padre y más tarde del mundo. Él también ha sufrido la pérdida, su esposa, su hijo y la mujer que amaba con todo su corazón, aunque no se dio cuenta de ello hasta que era demasiado tarde.
Ahora Eleanor ha aparecido de nuevo en su puerta, con unas escandalosas fotografías de Hart desnudo tomadas hace mucho tiempo. Intrigado por el desafío que brilla en sus ojos azules, y excitado por su encantadora e inquebrantable resolución, Hart se pregunta si su amor de juventud ha vuelto para arruinarle… o para salvarle. 


Desde la primera aparición de Hart MacKenzie en el libro de Ian (La locura de lord MacKenzie), su figura como jefe de clan autoritario y político influyente era innegable. Y como el resto de los hermanos, se intuía un pasado marcado por la violencia de su padre, la muerte de su madre y todas las desgracias que se fueron sumando en su matrimonio. Desde luego, no se puede negar que la familia MacKenzie es especial. 

Por su carácter dominante, me preguntaba qué historia, o mejor qué pareja le buscaría Jennifer Ashley para este personaje tan frío y calculador. Porque Hart MacKenzie es tan escandaloso como sus hermanos, posé la belleza de los hombres de su familia, esta acostumbrado a que todos le obedezcan, y además es ambicioso. ¿Qué mujer podría enfrentarse a un hombre tan especial? Sabía que no sería una damisela al uso, la primera aparición de lady Eleonor en la novela de Cam ya dejaba presagiar una mujer de carácter. Y en efecto, Eleonor no me ha decepcionado. 

Como en el caso de sus hermanos, Hart ha sufrido una infancia violenta, y como hermano mayor sabe que la seguridad de sus hermanos depende de él. Ese sentido de la responsabilidad no ha hecho más que crecer al convertirse en un adulto. Cuando llegamos a conocerle un poco mejor, no es responsabilidad lo que le llevó a vigilar con tanto ahínco a sus hermanos sino un fuerte instinto de protección. 

Y entre tantas desgracias, Hart tuvo en sus manos la llave de la felicidad: su compromiso con lady Eleonor era cuanto deseaba, pero como en esta familia nada es sencillo, lady Eleonor averiguó de manos de la ex amante de Hart un secreto que la hizo huir y romper el compromiso. A partir de entonces, dolido, el mayor de los Mackenzie se dedica a la política, donde puede dar riendas sueltas a sus maquinaciones para alcanzar lo más alto. Pero por ese camino, el que acaba convirtiéndose en duque pierde cualquier atisbo de felicidad en su vida: nuevas pérdidas como la de su mujer y su hijo, la violenta muerte de su padre. Oculta tras su ambición desmedida sus heridas y… el recuerdo de la mujer que siempre amó. 

Frente a un hombre tan intimidante tenemos a Lady Eleonor. Es la educación y la delicadeza en persona, lo que podría llevarnos a preguntarnos si estaría a la altura de un oponente como Hart. Pues sí, porque tras esa fachada aparentemente desvalida se esconde una mujer capaz de todo cuando alguien amenaza a los que ama, como es el caso de Hart. Porque a pesar de haber roto años atrás su compromiso con el duque, sigue amándole aunque sabe que su amor secreto nunca podrá florecer, porque ella descubrió su lado más oscuro. Sin embargo no duda en volver a la vida de Hart, para protegerlo de unas fotos que ella recibe de manera anónima, unas fotos que echarían a perder todo el trabajo del duque para alcanzar el cargo de primer ministro. 

La esposa perfecta para el duque mantiene el tono provocativo en las parejas de las anteriores novelas. Si algo caracteriza las novelas de Jennifer Ashley es la sensualidad y el poco interés en mantener las formas en una sociedad encorsetada. Sus protagonistas son profundamente conscientes de su sexualidad, tanto ellas como ellos, lo que da algo de frescura al género ya que no nos enfrentamos a ese baile de pudor tan característico en las novelas históricas aunque después no hay quien pare a las damiselas. Otro rasgo característico es la tozudez de los protagonistas, si bien Ian podía desquiciar a cualquiera con su forma de comportarse y tendría su explicación dado que sufre el Síndrome de Aspergen, Hart irrita a Eleonor por su autoridad y la inquebrantable seguridad de que todos le deben obediencia. Por suerte, y es lo que da ese perfecto equilibrio en las parejas de esta serie, es que un protagonista tan imbuido de sí mismo, y a la vez tan inseguro en cuanto al amor, se enfrenta a una mujer que hace lo que quiere sin dejarse amilanarse pero sin perder las formas en sociedad. Sin embargo en la intimidad, es incapaz de resistirse al encanto de Hart. Dónde hubo fuego siempre quedan brasas… 

Otro punto que me ha gustado es averiguar como siguen las historias de Mac, Cam e Ian. Es curioso ver como todos esos hombres atormentados se han convertido en padres de familia y devotos esposos, alejando de sus vidas la sombra de su padre. 

En esta novela la estrecha conexión que une relación a Hart e Ian se da a conocer más a fondo, pero esta vez no es el duque el que protege a su hermano menor, sino todo lo contrario. 

La esposa perfecta para el duque no es de mis favoritas de la serie, y creo que para mi gusto ha sido de las más flojitas, porque algunos asuntos pierden fuerza a lo largo de la novela, pero no puedo negar que he disfrutado de principio a fin. Hay pasión, oscuros secretos, escenas divertidas, el irresistible encanto de los MacKenzie que siempre funciona, sin olvidad las peculiaridades de toda la familia. Conclusión: me ha gustado la historia, el estilo de la autora y sus personajes. Lo que no me ha gustado... La portada. ¿Cuando dejaremos atrás esas parejas en pleno arrebato de pasión? 

Ahora solo me queda esperar que llegue cuanto antes la historia de Daniel…