Viento y ceniza

27 mayo 2011



Viento y ceniza
Autor: Diana Gabaldon
Título original: A Breath of Snow and Ashes
Editorial: Grupo Planeta / Abril 2007
ISBN: 978-84-08-07055-9
Género: Viajes en el tiempo
Serie: 6º- Forastera
Corre el año 1772, en los días próximos a la revolución americana, y la larga mecha de la rebelión ya está encendida; en Boston hay muertos en las calles, y en las zonas apartadas de Carolina del Norte las cabañas aisladas arden en la oscuridad del bosque. Sobre la casa del cerro de Fraser, donde vive Jamie Fraser con su familia, acecha una sombra cada vez más larga...

En esta sexta entrega volvemos a Carolina del Norte donde Claire y Jamie Fraser han conseguido crear una comunidad en el cerro de Fraser, una pequeña Escocia en las colonias. Jamie, líder nato, se ha convertido en un miembro clave al que todos acuden por su temple sensato y por su mano dura cuando las circunstancias requieren desenvainar las armas. Por su parte, Claire también es un miembro destacado e intenta introducir la medicina moderna del siglo XX con los escasos medios a su disposición, no sin despertar cierta desconfianza.
Claire tiene que enfrentarse a un difícil trance que le supondrá replantearse la crudeza del tiempo que vive, aprender a superar el trauma con el apoyo de Jamie, el único que podrá entenderla; sin obviar los obstáculos, los temores y las dudas. Será una dura prueba para la pareja.
Por otro lado Brianna y Roger se sienten cada vez más intranquilos, añoran el siglo XX, cada uno con sus inquietudes. Ella necesita dar rienda suelta a su espíritu inquieto, construir, aportando comodidades totalmente inusuales en aquella época. Roger, por su parte, se siente cada vez más ajeno a una época violenta; sufre una crisis espiritual que creará tensión en la pareja. Si en el caso de Claire y Jamie la relación se basa en una absoluta confianza ciega; en el caso de Brianna y Roger, son dos polos opuestos que se aportan lo que el otro necesita: ella es impulsiva e inquieta; él es sosegado y reflexivo. En esta novela tienen que tomar una decisión crucial que afectará a la familia Fraser, con los peligros que ello conlleva. El miedo a quedarse de nuevo embarazada en una época en la que la tasa de mortalidad en los partos era altísima crea malestar, sin hablar del riesgo de encontrarse de nuevo con Bonnet.
Y la historia sigue pisándoles los talones, tienen que posicionarse, con lo que eso significa en la vida del cerro. Conocer el desenlace de los acontecimientos que se desarrollan no hace más segura la vida de los Fraser. Diana Gabaldon nos hace un retrato de los inicios de la guerra civil muy cercano, a través de los habitantes del cerro, las consecuencias de las decisiones tomadas en los despachos. También toca el tema de los derechos de los indios o los de las mujeres, ciudadanos de segunda categoría en una sociedad machista. Reconozco que en algunos casos algunos capítulos que relataban todos esos hechos históricos se me han hecho un poco largos y en otros casos, el día a día en el cerro aportaba poco a la trama principal.
Ian y Fergus toman relevancia en esta novela, somos testigos de los cambios en sus vidas. Pero también conocemos nuevos personajes que tendrán un papel muy importante en las vidas de la familia Fraser, como la familia Christie por ejemplo o los Bug. Lord John sigue apareciendo, aunque sea en su mayor parte a través de la correspondencia con Jamie, un lazo que impide a éste olvidar su pasado y despertando la desconfianza de Claire.
De la historia de amor entre Claire y Jamie, poco se puede añadir, sólo que ambos se han convertido en personas maduras, así como su amor. Ver la faceta de abuelo de Jamie es uno de los puntos que me ha encantando y hay que decir que  Jem es un pequeño bicho que despiertaba mucha ternura. Aun así la pareja sigue emocionándose con su entrega y diálogos con humor, otros con la intensidad de sus sentimientos:
Después de un lapso inimaginable, regresé lentamente, bajando en fragmentos de las nubes, como granizo. Y me encontré con la cabeza apoyada en las piernas de Jamie. Y lo oí diciendo en voz baja, para sí mismo, o para mí:
—Por ti, continuaré… aunque sólo por mí… no lo haría.
En resumen, a pesar de tener algunos capítulos que se me han hecho un poco cuesta arriba, Viento y ceniza me ha gustado. Diana nos ha descrito una época desde un punto de vista doméstico, con la incertidumbre, los errores y los cambios inevitables, donde nada es blanco o negro. He disfrutado con los protagonistas y estoy deseando saber más de sus vidas porque ha quedado en un momento crucial.