La hija del pescador

La hija del pescador

Título original: The Fisherman's Daughter

Autor: Molly Jackson

Editorial: Plaza&Janés, Narrativa Femenina / Febrero 2011

ISBN: 9788401383762

Género: Contemporáneo

Una novela de amor y amistad, de odios y remordimientos, cargada de intriga, en un pequeño pueblo de Escocia. Robbie Fraser acaba de perder a las dos mujeres de su vida: se ha divorciado de su mujer y su madre acaba de morir. Nunca ha sabido nada de su padre hasta que, justo después del entierro de su madre, recibe una nota anónima enviada desde un pequeño pueblo escocés, en la que le informan de que su padre está en peligro. Robbie decide viajar a esta localidad y resolver todos los enigmas que encierra su pasado. Para ello, se instala en la casita de su padre y empieza a investigar la vida de este hombre que es para él un completo desconocido. Encontrará fotos de cuando era bebé junto a su padre y su madre, así como cartas que su padre le envió y que fueron devueltas sin abrir. En este proceso conoce a Heather, una joven que le ayudará en su investigación.

La hija del pescador es ante todo una historia de celos y venganza más que una historia de amor y amistad. Consta de cinco partes, las tres primeras están muy definidas; en la primera conocemos a Robbie Fraser y somos testigos de la introspección hacia su futuro sombrío y desolado y hacia su pasado, la infancia solitaria con su madre, una figura paterna sin rostro y muchas preguntas sin contestar. Y para añadir más incertidumbre, le llega una carta anónima diciéndole que su padre está en peligro. Llevado por un impulso, abandona Londres y se dirige a un pueblecito pesquero en Escocia, donde descubre que su padre: Hamish Fraser, ha desaparecido y que nunca dejó de pensar en él, en el pequeño Robbie. Las preguntas no hacen más que crecer hasta que en la puerta de la casa de su padre aparece una mujer: Heather. Ella es la única que parece tener las respuestas que necesita.

En la segunda parte conocemos a Hamish, su infancia feliz. llevado por su carácter abierto y jovial, somos testigos de cómo se hace amigo de MacBain, un niño huraño, recién llegado de Edimburgo que no conoce más que la violencia que su padre alcohólico imparte indiscriminadamente a todos los miembros de su familia. Con esa recién estrenada amistad se planta la semilla de todas las desgracias que asolaran la vida de Hamish hasta convertirse en el hombre solitario que Robbie descubre y busca.

En la tercera parte vemos hasta qué punto los celos y la envidia pueden llevar a la más cruel que las venganzas a través del engaño, mentiras que socavan hasta los afectos más profundos.

En estas dos ultimas partes de la novela, muchas veces la sangre me hervía porque los acontecimientos y las repercusiones se veían venir, en eso la novela es previsible, lo que despertaba mi indignación frente a las injusticias. Y de hecho, tras acabar la historia, me dejó un sabor agridulce.

La hija del pescador tiene una narrativa amena que se lee rápido aunque en esa segunda parte algunos capítulos se me hicieron un poco largos, aunque admito que necesarios para conocer a Hamish y entender sus errores, así como los de los demás involucrados. Pero esa sensación se me hizo más evidente cuando llegue a la cuarta parte y sobre todo en la quinta, que es el desenlace, donde llegan las respuestas. En estas dos partes, sobre todo en la última, todo me pareció precipitado, demasiadas revelaciones en unas pocas páginas, revelaciones que tienen repercusiones en la vida de los protagonistas. Si bien en la segunda parte el autor se tomó la molestia de ser detallista, no entiendo porque pasó tan por encima lo demás. No sé, pero me dio la sensación de que había que rematarlo, como si se le acabara el tiempo. Y eso tuvo su repercusión en ciertos personajes que tuvieron un final que no me convenció. No diré de quien hablo en concreto para no desvelar, pero pasar de ser una persona manipuladora y soberbia a la docilidad y resignación en tan pocas horas no me convenció.

En resumen, la historia es buena, dando saltos del presente al pasado. Hasta cierto modo son dos historias; la de los padres y la de los hijos. 

Esa es la diferencia entre nosotros –pensó Robbie-, la generación anterior piensa que tiene que sufrir por los errores cometidos y negarse lo que la vida les ofrece.

Y estos tendrán que enfrentarse a los errores de sus padres. Si dejamos de lado el final un tanto atropellado, he disfrutado con el libro y sus personajes, algunos odiosos, otros débiles, o valientes y Hamish, para mí el verdadero protagonista de esta historia. Un personaje que atrae la simpatía del lector a pesar de sus errores, su ingenuidad a la hora de confiar en los demás.

Con todo no es una novela que aconsejaría a diestro y siniestro, primero porque si buscáis romance, es casi inexistente y es esa parte precipitada de la novela. Si las injusticias os desmoralicen, olvidadla porque os dejara un sabor agridulce, hay justicia, pero... No digo más porque hay cosas que no tienen marcha atrás. Y finalmente porque a pesar de estar bien relatada, con algunos personajes muy bien perfilados, para mi gusto le ha faltado algo.

Y aquí me gustaría hacer un pequeño apartado. Cuando leo un libro, me gusta saber algo del autor y en éste caso busqué. Me sorprendió no encontrar ni una sola foto de la autora, ningún dato. Lo único cierto es que La hija del pescador parecía ser su primera novela, cosa que me sorprendió por la soltura en la narrativa. Y como soy curiosa por naturaleza, seguí buscando porque estaba realmente intrigada por Molly Jackson… hasta que di con la verdad.

Resulta que Molly Jackson es un seudónimo, hasta aquí nada nuevo; pero si os digo que esta autora desconocida por todos es más conocido como Chris Ryan por escribir novelas de un cuerpo de elite que se dedica a salvar el mundo, ¿no os parece curioso? Es decir, que Chris Ryan dejó salir su lado más sensible con esta novela del género narrativa femenina. Pero mi sorpresa fue más allá porque resulta que Chris Ryan es un héroe en la vida real, un ex agente del S.A.S, un cuerpo de elite del ejército británico. Su hazaña fue ser el único superviviente en una misión durante la Guerra del Golfo, una verdadera aventura que le llevó al borde de la muerte y por la que fue condecorado la Medalla del Mérito Militar y fue dado de baja con honores unos años después del ejército. Después de leer la novela, enterarme de esto me pareció un detalle de lo más curioso.

Por lo que he leído, Molly Jackson pasará a la historia de las estrellas fugaces porque escribir La hija del pescador fue, según su autor, una experiencia que no piensa repetir porque se siente más a gusto escribiendo sobre lo que realmente entiende y conoce: La vida de un hombre de guerra.